martes, 15 de mayo de 2018

Entrevista Rafael Fernández Fernández

Rafael, abril 2018
            Entrevistamos hoy a Rafael Fernández Fernández, Rafa “Fotos” para amigos y conocidos. La palabra “Fotos” no es ningún apodo, sólo es indicativa de una de sus mayores aficiones. Rafael nació, en la casa que sus padres habitaban en la Calle Nueva nº 38 – hoy 34, el 15 de octubre, día de Santa Teresa, de 1959 en Alcaracejos. Sus padres Germán y Ana ( ) tuvieron otra dos hijas Cati y Ana Mª. Pertenece a una familia bastante numerosa: hace cinco años organizaron la “Reciada 2013” y se juntaron más de setenta personas. Por lo que conozco Rafael es una persona afable, tranquila y servicial. Muy comprometido con su pueblo y con sus tradiciones. Colaborador habitual en fiestas y celebraciones. Es persona que no se aburre nunca y, como podremos apreciar a lo largo de esta entrevista, tiene una personalidad rica que la manifiesta en las diferentes actividades que realiza. Su buena disposición para esta conversación ha sido total, cosa que le agradezco de corazón. También puedo certificar que tiene buena memoria.
       La entrevista la realizamos a lo largo de dos fines de semana del pasado mes de abril y, en mi opinión, es de interés para todos los mojinos y personas interesadas por el pueblo.

Cortijo "Casa el Cura". La familia completa (1966)
       Te criaste en la sierra….? ……en el pueblo? Yo me crie en la sierra, en las Cuatro Casillas, hoy Camino Falda de la Sierra. Era un cortijo heredado por mi padre por parte de abuela, Catalina Sepúlveda Rodríguez. La casa es muy sencilla: dos habitaciones, salón, cocina, cuadra, pajar y una “enramá”. A pesar de los años no hemos hecho ninguna obra. La luz va por placas solares y el agua la cogemos de un pozo nuevo que hicimos mi padre y yo de 4 – 5 m. de hondo, a unos 100 m del cortijo. Es una zona de mucha agua y casi se toca con la mano. El agua baja a la casa por la propia inclinación del terreno. Recuerdo que mi tía estaba en “Cortijo el Cura” o “Casa el Cura”, cerca de la mina del chaparro barrenado y desde las Cuatro Casillas íbamos a la matanza. Mi padre nos transportaba metidos en las aguaderas de la mula y lo pasábamos muy bien. Una vez el Cuzna iba muy lleno, había llovido mucho, y un puente – de piedra y cemento- que hay algo más abajo del Coto iba cubierto por completo. Sólo sobresalían un poco unas piquetas que estaban clavadas en él y no pudimos pasar.
       ¿A qué se dedicaban tus padres? Mi padre trabajó en la Mina del Puerto que era de baritina y plomo. También se dedicó al campo: olivos, sementeras….animales pocos, algunas ovejillas. Mi madre era la que llevaba la casa. Recuerdo que me gustaba ayudar a mi padre en todas las tareas del campo: He trillado, he segado, he cargado haces de cebada, he llevado sacos al molino…
       ¿Cómo era tu casa en el pueblo? Mi padre compró una casa en la calle San Sebastián, núm 5, antes General Mola. Era una casa igual que otras muchas del pueblo: abovedada, con tres habitaciones, la cocina en el segundo cuerpo a la izquierda, empedrada por el centro y con su buena cámara arriba. Al final estaba el corral.
Interior escuela Puerto Calatraveño. Con sus
hermanas Cati y Ana Mª. 1065 - 66
       ¿Con quién jugabas? ¿Quiénes eran tus amigos? ¿A qué jugabas? ¿Tu juguete preferido? En la sierra jugaba con mis primos, los hijos de mi tío Marciano, hermano de mi padre. En la memoria guardo unas latas de sardinas: iban atadas formando una especie de tren. Era una alegría poder jugar con mis hermanas. También echaba buenos ratos con los compañeros de la escuela. Los juegos eran los normales de la época: piola, al esconder, cebolla, al corro (con las niñas), trompo, los cartuchos (Virgen de Guía), bolindres etc…Todos los juegos necesitaban mucho ejercicio físico. Como algo especial, que me encantó, puedo mencionar un porta – aviones de chapa que me compró mi madre. Antes los juegos de los niños salían muy baratos pues se jugaba con objetos sencillos (cartuchos, bolindres, piedras, trompo, pelota…) ahora todo esto ha cambiado bastante.
       Sé que fuiste a la escuela del Puerto Calatraveño. ¿Nos puedes comentar algo sobre esa escuela, tus compañeros, maestros….? Pues sí, fui alumno de la escuela rural del Puerto Calatraveño. Tengo una foto con mis hermanas en el interior de la escuela. Debió ser, más o menos, en 1965 – 66. Esa escuela hizo una buena labor. Iba gente de los cortijos, de la mina y del Cerro Sordo. “En invierno llevábamos botas de agua y capote”. Allí estuve con Dª Mª Carmen Portero Muñoz y al principio la llevaba su marido, Pepe Caballero, con una Vespa. Luego Dª María se compró un Seat-600, que pronto sustituyó por un Simca-1000 verde, e iba recogiendo alumnos por la carretera: en el Ventorro Gaspar recogía a la Pili del “lobo”, al pasar el Cuzna a los sobrinos de Jesús – que trabajó con el carro de basura - y en la Venta Durán a un muchacho de Villanueva del Duque. Otra gente iba andando, como la Carmen de la Ascensión de Doñas que estaba en el cortijo de Miguel Nieto. “Mis hermanas y yo, mis primos y otros niños de las Cuatro Casillas hacíamos casi tres kilómetros para ir”. Me acuerdo que el “Arroyo las burras” tenía un puente de palo y un día se lo llevó el agua. Nos tuvimos que volver al cortijo y mi padre con la mula nos pasó al otro lado. Después cada cual tiró para su sitio. Años más tarde, en el pueblo asistí a unas clases que se llamaban “permanencias”. Estuve con Dª María Sánchez y con D. Miguel Santos.
Los tres hermanos en el Cortijo de la Sierra
de su padre. La foto es del "Magne" (1969)
            Todos los domingos el párroco, D. Jesús Fernández Palomo, iba a decir misa en el local de la escuela y una vez hasta hicimos una procesión por la carretera con la Virgen del Carmen.
        ¿A qué edad empezaste a trabajar? ¿Haciendo qué? Con 16 años me fui con mi hermana Cati a la vendimia. Serían los años 1976 -77. El primer año estuvimos en Villarrobledo y el segundo en Pozohondo (Bodega Casa Maikel), ambos en Albacete. Fuimos con gente de aquí y de la Añora. Dormíamos en una gran nave con literas laterales, hombres y mujeres separados, aunque también había habitaciones para matrimonios. Con nosotros vinieron Santiago y la Kika (Francisca), la hija de Fuencisla y Pablo, Benjamín Franco, mi primo Juanito, etc…También por esa época trabajé en la aceituna con Francisco “Junquito” que era el manijero. A los 18 años me saqué el carné de conducir para turismos.
       Hiciste el servicio militar en…¿Estuviste con algún paisano? Estuve en Colmenar Viejo de recluta haciendo el campamento, desde allí se veía la nieve en la Sierra de Guadarrama. Luego me destinaron a Getafe, al cuartel. Fui conductor. Normalmente no se salía de Andalucía, pero en el sorteo me tocó Madrid. Allí tenía a mi tía María, hermana de mi madre. En 1981, gracias a un teniente de Fuente Tójar, que me ayudó mucho, me saqué el carné de primera para conducir camiones, aunque luego manejaba un “wylli” (un jeep) para trasladar a jefes y oficiales a Madrid, a otros cuarteles, maniobras etc…Al final conseguí el pase de pernocta y dormía en casa de mi tía en Leganés.
            Personalmente te veo como una persona inquieta, polifacética, activa...una persona de la que se puede aprender. Intuyo una viva personalidad y ese rostro tranquilo y apacible trasluce inquietudes y  curiosidad.  Vamos a ir analizando algunas de tus variadas facetas.

       Sé que perteneces a la Hermandad de la Virgen de Guía desde 1986. Cuéntanos. Me apunté por unos amigos y cuando murió Miguel Villanueva entré por él. Desde 2001 estoy de Secretario. Antonio Ranchal quería dejarlo y nadie quería ocupar ese cargo. Hubo una reunión en casa de Miguel
La familia: "Reciada 2013", unas 70 personas
Alfaro. Yo exigí una votación y salí elegido por mayoría absoluta. Para mí es un privilegio y un orgullo servir a la Hermandad y haber sido su Capitán en el 2018. Yo me acojo mucho a “Ella”. Le tengo gran devoción.

       Corresponsal del Diario Córdoba. ¿Puedes explicarnos como fue eso? Me nombraron informador / reportero en 1988-89. Hubo un curso de foto y prensa en Pozoblanco, estuvo organizado por la Diputación. Vinieron Ladis y Rafael González Zubieta y me apunté: ahí ocurrió el nombramiento, junto con Paco Sicilia, que es de Pedroche. Al principio las crónicas de fútbol las enviábamos por teléfono. ¿Qué tipo de noticias remitías al periódico? Mandaba bodas, información sobre fiestas locales, algún bautizo, noticias sobre emigrantes en Cataluña, fútbol local….Recuerdo que una vez encontramos un búho con un ala rota por el Cuzna. Lo devolvimos con la intervención del ICONA. Lo contamos y el diario lo publicó.

       Fotógrafo: ¿Desde cuándo tu afición a la cámara? Mi primer contacto con las fotos se remonta a mi niñez en el cortijo. El “Magne”[1], de vez en cuando, iba con su Vespa por allí. Siempre hacía alguna foto. Aquello me llamó la atención. Mi primera cámara la tuve cuando fui quinto. Fue una Kodak que hacía las fotos cuadradas en blanco y negro. Éramos 26 quintos así que del cliché[2] tuve que sacar 26 copias. Creo que tengo guardados todos los clichés y luego los CD’s, así que tendré miles de fotos. Una foto a la que guardo cariño, quizás la mejor, es una que hice del Parque de la plaza Andalucía, con los bancos. Antonio Mansilla, alcalde, hizo una ampliación enorme, de 2m x 1’5 m. Cuando la vi tan grande, me emocioné. No me gusta hacer fotos con el móvil porque no tienen calidad y además se pueden perder….para algún imprevisto sí lo utilizo.

       Donante de sangre: ¿Por qué? ¿Cuándo surgió ¿ Cuantos años llevas de donante? Creo que mi primera donación fue en la mili. Pronto haré 40 años. Creo que es una buena labor y me gusta. Hace años me dieron un diploma, luego un pin y recientemente me han entregado un cordobán. En el pueblo hay un grupo importante de donantes.

       Sabemos qué bailas jotas y llevas la música popular muy dentro. ¿Te lo pasas bien? ¿Cómo nació ese grupo de baile? Estábamos unas parejas que nos gustaba bailar. Se organizó una escuela de baile por el Ayuntamiento en la Mancomunidad y colaboramos bailando jotas en Los Coloquios. Durante un tiempo estuvimos acompañados por el grupo Alcaria. Luego vino de Córdoba el Grupo San Rafael y nos enseñaron a bailar mejor. En principio bailábamos en el pueblo y poco a poco nos fuimos acompañando de instrumentos tradicionales: eran los útiles de uso en las cocinas de los cortijos y otros: lavadera, almirez, sartén, botella de anís, etc…El pasado 14 de abril estuvimos en Conquista, el 15 en Belalcázar, el 29 de abril en la Residencia de Añora. También hemos bailado en Las Cruces de mayo. Bailar jotas es una costumbre que no deberíamos perder, además se pasa muy bien.
José M. Villanueva; José M. Santos; Antonio Escribano y
Rafael Fernández (Marzo 2013). Cochera de su primo Juan Fdez.

       ¿Qué nos puedes decir de tu actividad como cronista? Me nombraron cronista del pueblo en 1986, siendo alcalde Antonio Mansilla. Podría decirse que soy más cronista gráfico que escrito. Al principio escribía más. Ahora mi colaboración casi que se reduce a colaborar en el Programa de Feria.

       ¿Tienes miedo a cumplir años? No. Como no hay pared que esto lo pare….pues p’alante.

      ¿Qué fiestas del pueblo te gustan más? La Navidad es bonita, pero resulta demasiado triste pues siempre te acuerdas de los que ya no están. Prefiero la Semana Santa y pasarla en el pueblo. A veces hemos dicho de ir a otro sitio pero no nos acabamos de decidir.

       ¿Tu tiempo libre lo empleas en…..? No tengo tiempo libre. Siempre estoy haciendo algo.

       ¿Qué opinión tienes de los jóvenes de hoy? Hay de todo….en general creo que van bastante a su bola.

       ¿Qué viaje te gustaría hacer? Por su historia y por ser el centro del Cristianismo me gustaría visitar Roma. Podría haber ido este pasado mes de abril, pero no cuadró. También me llama la atención ir a Nueva York. Ver la estatua de la Libertad tiene que ser impresionante.

       ¿Algo que según tú haga falta en el pueblo? Pues mira echo de menos un cine. Cuando ponen películas en el Santo, en la explanada del Silo o en el patio del Ayuntamiento la gente acude. Ir al cine es una actividad social y cultural que personalmente me gusta. Lo paso bien.

            Terminamos. La entrevista ha transcurrido con naturalidad, con una sencillez que lo define. Con su conversación, tengo la sensación de haberme paseado por una dehesa de verdes encinas que transmiten buenas vibraciones, calman el espíritu y dan seguridad. Me confirmo en su tremenda generosidad si lo tratas por derecho, es un enamorado de su pueblo y firme defensor de sus tradiciones…además de su enorme humanidad. Al menos, a mí, así me lo parece.

            Por mi parte sólo me queda agradecer su colaboración en este blog y animarlo a seguir trabajando por un Alcaracejos más conocido, por un Alcaracejos mejor….Cosa que estoy seguro que seguirá haciendo. ¡Gracias Rafael!.
Dia de la matanza (Foto: Cope Pozoblanco 2014)




[1] Miguel García Moreno, “El Magne”, fotógrafo de Peñarroya – Pueblonuevo.
[2] Tira de película fotográfica revelada, con imágenes en negativo.