jueves, 13 de julio de 2017

Ermita S. Andrés Alcaracejos II


Fachada Ermita S. Andrés (1946)
       Todos los edificios tienen una historia que contar ya que son producto de una época y de unas circunstancias concretas. Si además se trata de edificios públicos el tema ya no admite discusión. En el marco general podemos decir que mientras esta ermita se gestó el mundo estaba inmerso en la II Guerra Mundial: en 1945 se rindió Alemania y los EE.UU. bombardearon – con sendas bombas nucleares – Hiroshima y Nagasaki. Era un mundo convulso que contrastaba con la tranquila fachada de la ermita. En España el clima era de post – guerra: la construcción de nuevos edificios no podía tapar el exilio, la represión, ofensivas de los monárquicos por recuperar el poder, cartillas de racionamiento, agricultura de baja productividad, escasez de industrias, bloqueo internacional, evolución catastrófica de la economía, hambre etc…. Hubo que esperar a la década de los 50 para que España empezara a respirar como país.

Los planos de la ermita tienen fecha de octubre de 1943 lo que quiere decir que la ermita sería terminada e inaugurada un par de años después. Eso nos lleva a finales de 1945 o principios del 46. Datos aportados por Claudio Muriel[1] aseguran que en la primavera de 1946 D. Antonio Fernández Caballero era el párroco, casi con seguridad primer párroco, y fue el que asistió a la proclamación de dicha ermita como parroquia. No deja de ser curioso que este hombre decía haber escuchado a los mayores del pueblo que “la Ermita de la Magdalena – en el cementerio – fue la primera Iglesia Parroquial de S. Andrés[2]”. Según cuenta D. Francisco Vigara, párroco de Villanueva del Duque, el Obispo Fray Albino[3] viajó expresamente, en 1952, para visitarlo y darle ánimos en su enfermedad[4]. Al mismo tiempo este compañero le dedica el capítulo VI de la primera parte en su reciente libro de 2016 sobre la ermita de la Virgen de Guía. D. Antonio murió el 3 de julio de 1953 y está enterrado en el cementerio de Alcaracejos. En la lápida podemos ver su foto y la mención especial de la Corporación Municipal presidida por D. Germán Santos.
Interior del templo (1946)
El segundo y último párroco en esa ermita y a quién recuerdo muy bien es a D. Jesús Fernández Palomo[5], persona muy ligada a Alcaracejos durante un montón de años. Mis datos son desde 1953 hasta 1972. Entiendo que D. Jesús fue un sacerdote de la época, con planteamientos algo cerrados pero con indiscutible buena voluntad y muy preocupado por Alcaracejos y sus vecinos. Luchó lo indecible por mantener las tradiciones religiosas del pueblo, así como por las cofradías, hermandades, asociaciones católicas y cursillos de cristiandad. Se preocupó mucho por la formación de niños y jóvenes. En 1966 participó en la misa concelebrada de inauguración de la nueva Iglesia Parroquial y batalló a lo largo de varios años para que el constructor y el Ministerio de la Vivienda (Regiones Devastadas) subsanaran los defectos de construcción encontrados en el nuevo templo. En 1972 se trasladó a Córdoba como párroco de la Parroquia San Antonio de Padua, en la C/ Agrupación Córdoba. Murió el 22 de diciembre 1981.
De la Ermita de San Andrés podría decir muchas cosas, pero sólo comentaré algunos aspectos que viví como niño y que tengan alguna relación con ese templo.
Preciosa vista desde patio interior (1946)
Allí aprendimos el Catecismo con la ayuda de las pacientes catequistas: repetíamos y repetíamos hasta saberlo casi entero, de memoria, para hacer luego la Primera Comunión. Por Cuaresma iban unos misioneros a predicar y recuerdo que dejaban unas cruces de madera que ponía Santa Misión y el año. Había una de 1956. También por Cuaresma, en Semana Santa liaban las imágenes en unos paños morados, como ocultándolas, cosa que me resultaba desagradable. D. Jesús creó un grupo de niños tarsicios[6] para aumentar nuestra religiosidad. Teníamos un libro con su vida y con abundantes reflexiones. Lo recuerdo como algo muy serio que intentaba parecerse a grupos de adultos, como p.e. la Adoración Nocturna.

Una vez hubo un pequeño incendio. En el altar mayor había varias filas de velas y estaba engalanado. El centro lo ocupaba la imagen de la Virgen, una Purísima, creo. Encendiendo las velas con una caña, Vidalín – sobrino de Vidal el sacristán - monaguillo – le dio con ella a una vela ya encendida. Unas gasas y telas prendieron con rapidez. D. Pedro Benito, nuestro maestro, no lo dudó. Rescató la imagen de la Virgen y junto a otras personas apagaron el fuego. La imagen del maestro con las manos quemadas la mantengo a pesar de los años. ¡Menudo susto!.
Ir a las procesiones era un poco aburrido para los niños por eso nos peleábamos por quedarnos a repicar las campanas. El ruido de los campanillos al girar era ensordecedor pero resultaba más agradable y alegre que asistir a la procesión.
Catecismo (1962)
Me llamaba mucho la atención la cantidad de agrupaciones, cofradías o hermandades que estaban presentes en distintas ceremonias. Siempre había mujeres con escapularios y se sentaban juntas. Me puedo olvidar de alguna pero puedo citar hermandades de S. José, de la Virgen del Carmen, del Corazón de Jesús, de la Virgen del Rosario, …etc
Cofradías de Jesús Nazareno, de la Virgen de los Dolores… Agrupaciones de la Adoración Nocturna, Acción Católica, Hijas de María... y por supuesto la Hermandad de la Virgen de Guía.
Llegó la tele al pueblo – eran los años 60 - y D. Jesús fue consciente de su importancia. En el lateral derecho de la Ermita dispuso un salón parroquial y pagábamos una peseta por ver Herta Frankel[7] con sus marionetas o las Aventuras de Rin – Tin – Tin. Lo peor era que nadie escuchaba nada porque todo el mundo hablaba, pero allí nos reuníamos los niños del pueblo para ver el programa infantil los sábados por la tarde.
Balcon, herrajes y campanas (1946)
En 1964 La instrucción Inter Oecumenici (26-IX-1964), editada por el Cardenal Larraona, prefecto de la entonces Sagrada Congregación de Ritos, y por el Cardenal Lercaro, presidente del Consilium para la renovación postconciliar de la Liturgia, estableció lo que sigue: «Constrúyase el altar separado de la pared, de modo que se le pueda rodear fácilmente y la celebración se pueda realizar de cara al pueblo. El altar ocupe el lugar que sea de verdad el centro hacia el que espontáneamente converja la atención de toda la asamblea de los fieles». Desconozco si en esta iglesia se hicieron reformas para poner el altar de cara a los fieles, pues en esa fecha ya se estaba construyendo el nuevo edificio parroquial. Lo que si se produjo fue decir la misa en castellano. Tanto una cosa como la otra fueron logros del Concilio Vaticano II haciendo de la Iglesia una institución más próxima y abierta a la gente.
Cooperativistas con el Sr Ministro Inciarte

Terminada su utilización religiosa en 1966 la Ermita queda libre y sin uso definido. Me consta que allí se produjeron algunas reuniones de los Cursillos de Cristiandad y algunos homenajes a los Mayores del pueblo. También cobijó a la Cooperativa de Confección Nuestra Señora de Guía [8] que durante unos años funcionó con el esfuerzo y colaboración de un puñado importante de mujeres mojinas.
En la actualidad el edificio está vacío, un poco dejado de la mano de Dios y esperando alguna idea que le permita reintegrarse a la historia del pueblo.




[1] En esas fechas D. Antonio fue solicitado, como párroco, para dar referencias de Claudio a una familia de Tarifa, con motivo de iniciar una relación con una chica de allí.
[2] Alcaracejos y su escudo. Ayuntamiento. 1955
[3] Fray Albino González Menéndez- Raigada
[4] Esto está recogido en el Cap VI del libro , de Francisco Vigara, párroco de Villanueva del Duque, “Misterios de la ermita de la Virgen de Guía”.(2016)
[5] De correspondencia mantenida con Claudio Muriel se deduce con claridad que dejó el pueblo en 1972.
[6] San Tarsicio es el patrón de los monaguillos y de los que hacen la Primera Comunión. http://www.corazones.org/santos/tarsicio.htm
[7] Herta Frankel , ventrílocua austriaca, se dio a conocer a principios de los 60. Fue muy popular entre el público infantil gracias a su show. Manejaba con gracia y soltura un espectáculo de marionetas: Pepito, Tonto,  Gruñón y la Tia Cristina. Tonto decía su frase preferida “Siempre que sucede iguallllll….. ocurre lo mismooo”. Herta alcanzó la fama con el programa “Dia de Fiesta” y su perrita Marilyn, caniche impertinente y respondón creado por Elvira de Loyzaga.
[8] Ver artículo de Claudio Muriel en el Programa de Feria de 1982: “La gran lección”.
[9] Todas las fotografías han sido obtenidas de la Biblioteca virtual de Castilla - La Mancha. Revista Reconstrucción nº 63 correspondiente a mayo de 1946, exceptuando la que muestra las cooperativistas que fue publicada en el Programa de Feria de Alcaracejos de 1982.

2 comentarios:

  1. En ese templo hice mi primera Comunión. En alguna ocasión, "ejercí" de monaguillo y,en más de una ocasión, tuve el placer de tocar y repicar las campanas. Muy buenos recuerdos nos has despertado, Sebastián.

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