miércoles, 29 de diciembre de 2021

Navidad, calles, vecin@s y Alcaracejos

 

Portal en escaparate. C/ Rafael Aguirre

Ayer visité Alcaracejos y pude comprobar que se ha vuelto a vestir de Navidad con un afán de superación digno de elogio. Ni el virus, ni la lluvia, ni las infinitas dificultades que conlleva vestir variadas calles, todas demasiado grandes y con características muy diferentes, han podido con el esfuerzo y la ilusión que supone engalanar tu calle y diseñar un rincón con olor navideño: vecinos y vecinas hacen magia con las calles del pueblo y lo transforman en un pueblo de cuento, cuento que por páginas tiene el relato que cada calle encierra: tema soporte de su creación e historia que la rodea, materiales que emplean – muchísimos reciclados – personas que intervienen, problemas encontrados, reuniones mantenidas, anécdotas, etc, …Al recorrer los diferentes escenarios te impregnas de sus mensajes, de su ambiente ficción y acabas por formar parte de ellos. Te sientes uno más porque su fantasía, felicidad, su hospitalidad y su alegría terminan por anidar en tu corazón.¡¡¡ Hay mucho cariño e ilusión y muchas horas de dedicación almacenados en esas calles !!!

***

               Después de ver “El Nacimiento”, y un ingenioso árbol, de la calle Sevilla, pasé frio al recorrer la calle San Isidro, antigua calle de Regiones, convertida en “la Navidad de Olaf” y en particular en su rincón Frozen “El reino del hielo”: no se pueden perder las bellas expresiones de las caras sus figuras. La calle José L. Navarrete nos da la bienvenida al “Bosque de Navidad” y allí quise comer su “Casita de chocolate”. Me hubiera encantado, pero no pudo ser. Dar un paseo en el “Trineo de los Elfos” por el “Bosque mágico navideño” instalado por las calles Antonio López, Virgen de Guía y Antonio Caballero me hubiera hecho feliz, pero me convencieron para que no lo hiciera. Al pasar por la Plaza de los Pedroches, de repente, viajé 2000 años atrás al “pueblecito de Belén” y “su alegría me contagió al visitar El Portal y alrededores”; por cierto que en Belén me sorprendió encontrarme con tantísimos mojinos. Dicen que “No hay Navidad sin cuento” y en Alcaracejos estaba representado en la calle Ramón y Cajal con su sugerente Rincón de los Mojelfos, personajes nacidos en diciembre del 2021 y que habrá que tener en cuenta en un futuro.          

Árbol artesanal. C/ Cumbre

  En la calle Nueva me conmovieron los “Regalos con Ángel” donde las casas, balcones y ventanas mostraban sus enormes lazos como regalos. “Tener una casa es un regalo muy especial” se oyó en la oscuridad de la noche. En esta calle habían sido reutilizadas maderas deterioradas de la última inundación y cartelitos en las ventanas mostraban el agradecimiento de la calle a todos los establecimientos que colaboraron en su limpieza. Alcaracejos tiene sus propios “ángeles de la guarda”. Las calles Real y San Sebastián eran una fiesta de luz y colorido animadas por agradables pastoras y vecinas que, para mi placer, aparte de ofrecer presentes a los visitantes, no dejaron de cantar villancicos. Llamaron mi atención imágenes navideñas, realizadas con material sencillo y reciclado, aprovechando puerta, dintel y jambas de las casas. No perderse los ángeles hechos con unas perchas. Lugar destacado ocupaba su rincón “El Portal”. Más “Navidad en la calle”, imposible. La calle Cumbre era un pinar: Toda llena de “Pinos”. Todos entrañables: pinos en las puertas de las casas, un pino enorme de tetrabriks de leche, pinos de tela, …. Me llamó la atención un pino multicolor iluminado. Destacaba entre todos. Era una estructura de hierro, quizás alambre, forrada de tapetes cuadrados engarzados hechos a mano, algo tierno y encantador repleto del Espíritu de la Navidad y la gente mayor dando ejemplo de participación y entrega.

               De nuevo me sorprende la creatividad mojina: El café con leche” era el motor central de las calles Jesús y Real. Pura imaginación donde las capsulitas de café se convierten en piezas de museo. Simpáticos los granos gigantes de café. En la calle Capitán Ferrer Morales habían trasladado las costumbres terrenales de la Navidad al cielo, vamos que los ángeles seguían con sus villancicos y comiendo turrón, mazapán y perrunas. Pura ficción que da pie a un nuevo cuento. Las responsables de la calle Miguel López – dicen que solo han sido tres – se han multiplicado para estar presentes en el recorrido. Un esfuerzo reconocido aunque, al parecer, llegó una situación límite, pues en un portón luce solo un sugerente cartel que dice: “Aquí podríamos poner…..” y ya está… pero la calle luce y participa ¡y eso es lo importante!

Ángel hecho con perchas.
C/ Real y S. Sebastián 

               Después de casi tres horas dando vueltas por el pueblo llego al “Saloncito Navideño” de la C/ Rafael Aguirre, “Todo corazón”, y me dan ganas de sentarme a descansar: acogedor y cómodo. Original. Al final, en un escaparate de una tienda que vendió muebles, hay un portal con muchas figuritas con historia: tienen alrededor de ochenta años y se trata del Portal que ponían en la iglesia en nuestra infancia. Fue comprado por la “tía Margarita” que lo cedía a la parroquia cada Navidad para recogerlo a su fin. Con tanto trasiego, y con la edad, se deterioró mucho, pero ahora ha sido restaurado y las figuras aparecen vestidas con trajes muy vistosos. Otro viaje en el tiempo. “La ilusión reciclada” es obra de las calles José Ventura y Constitución. Un privilegio poder contemplarla en una noche templada como esta. En su rincón luce un jardín vertical digno de la mejor tienda de la Gran Vía y un pino delicado y esbelto completa un escenario de cine.


Puerta con Ángel. C/ Nueva

               Nuestro espíritu se ha reciclado para bien con este recorrido. El objetivo de El Grinch de robar la Navidad, eliminar adornos y regalos e impedir que llegue no se ha cumplido para nada. Si alguno somos un poco grinch este paseo por las calles de Alcaracejos lo borra por completo. Por cierto que su historia la pueden conocer en la calle Velázquez con su maravilloso rincón “El jardín de los juguetes”. Y no tengan miedo al visitarla porque el grinch acabó amando la Navidad como el que más.

               Son excesivos los detalles, las horas de trabajo que hay detrás….pero resulta imposible recogerlo todo ¡¡ Es mucho más lo que olvido que lo que aparece: es excesivo lo que no se ve!!....pero ahí está el resultado de un magnífico trabajo. Habéis hecho un pueblo mejor. Enhorabuena a todos y a todas, incluido nuestro Ayuntamiento.

Reno hecho de encina. C/ Antonio López y otras
 

Rincón "La ilusión reciclada". C/ José Ventura y Constitución
 

Homenaje a Los Coloquios. Giuseppe y Rebeca
C/ Plaza de los Pedroches
 

Garzas. Calles Antonio López, Virgen de Guía y Antonio Caballero

Gnomo

           

 

 







viernes, 10 de diciembre de 2021

La Cañada: retazos de su historia

Paraje de La Cañada, Alcaracejos (2011, Google)

La palabra Cañada nos proyecta la imagen y el sonido de multitud de ovejas guiadas por sus pastores y sus perros. Las cañadas, con más de 70 metros de anchura, son las hermanas mayores de los cordeles, 37’5 m., veredas, hasta 20 m. y coladas, menos de 20 m. Por su importancia y uso por la trashumancia, las cañadas más importantes se convirtieron en “reales” y fueron reguladas por edicto del rey Alfonso X el Sabio en 1273. En su conjunto, si observamos el mapa de España, eran como una cortina de autopistas que bajaban y unían el norte con el centro y el sur. Por nuestro término pasa la Cañada Real Soriana Oriental, vía de excepcional importancia que, con más de 800 kilómetros, comienza en Soria y llega hasta Sevilla.

                Alcaracejos tiene su propia Cañada. Se conoce así un ensanchamiento del antiguo camino de Córdoba a Almadén que, en el casco urbano más actual, iba por el callejón del Hospital, calle Empedrada, Travesía de Ramón y Cajal a San Isidro y Campo de Deportes, según José López Navarrete, archivo viviente y generoso de historias poco escritas, un Alcaracejos encarnado.

                Cuando éramos niños, recién inaugurados los sesenta, la Cañada era un gran espacio abierto limitado por la cara este del entonces campo de fútbol S. Isidro, un recinto cerrado con paredes de barro construido, posiblemente, por una empresa minera que por entonces explotaba el subsuelo del término mojino. En la esquina sur, a la derecha del rectángulo, por fuera, tenían por costumbre acampar los gitanos con sus familias. Sus vistosos carromatos los identificaban desde lejos. Allí montaban su campamento. Estaban solamente unos días. Siempre había una lumbre encendida con un puchero puesto y niños mal vestidos merodeando a su alrededor acompañados de galgos, muy flacuchos, con un palo delgado colgado de su cuello. Al parecer, este extraño colgante, hoy desaparecido, dificulta su carrera al golpear las patas delanteras y evitan que se alejen de la gente que cuidan. La particular forma de vivir de estas personas, yendo de un lado para otro y siempre al aire libre, era un ejemplo claro de un nomadismo típico en la España de la época, mezcla de costumbres y, con total certeza, de necesidad. En cualquier caso, siempre formarán parte de las imágenes de mi niñez.

                En esa gran explanada, al fondo, a la izquierda, había un pozo con abrevaderos y una serie de prismas cuadrangulares, alineados, hechos de pizarra, granito y de ladrillos, no demasiado altos. Sobre ellos ponían las mujeres el barreño de cinc y en su interior la tabla escalonada para lavar la ropa. Allí hacían la colada a base de sus manos y de jabón de sosa. La imagen de una mujer, con rodete y barreño conteniendo la ropa sobre su erguido cuello, la mantengo en mi mente. Un día desapareció el conjunto y quedó, por fortuna, solo el pozo, su brocal y tres pilas de granito. Gozan de la protección de una serie de pequeños postes, de granito también, que bordean un semicírculo.                

Dibujo del antiguo depósito de agua (1960). Goval

A la derecha de ese lavadero público, entre él y el cementerio, en un pequeño promontorio estaba un depósito de agua que venía del Horcajo (Ciudad Real), y que por horas, y solo en algunas casas, beneficiaba al pueblo. Según López Navarrete, entre 1975 -76, llegó una empresa al pueblo y arrambló con todo lo que fuera hierro (tuberías, tapaderas, etc…). Ni del terraplén, que fue bajado y subido miles de veces con las bicicletas, ni de aquel depósito queda rastro alguno. En ausencia de fotos, Goval, amigo y excepcional dibujante, nos refresca la memoria de ese trozo de patrimonio mojino desgraciadamente perdido para siempre.              

 La Cañada era también el lugar que acogía la Feria de Ganados, allá por el mes de septiembre, con motivo de la festividad de San Nicolás de  Tolenti- no[1]. Corresponde a 1950 este fragmento de acta del pleno municipal[2] bajo la presidencia del alcalde Florián Rísquez Puerto: “La Alcaldía manifiesta que como la Feria de Ganados se celebrará en la Cañada, es de su parecer que se necesiten, buscar o confeccionar, dos pilas para abrevar, facultando a la Alcaldía para que se hagan las gestiones de las mismas y vea si de las pilas del Pozo denominado nuevo hay alguna sobrante y si es posible trasladar una más, puesto que dicho lavadero es poco usado. También se acuerda que la Comisión de Festejos dé principio a las gestiones necesarias para la celebración de tales fiestas y feria”. Esta feria ganadera fue llevada a la poesía por Claudio Muriel en 1951[3]:

Por el acuerdo de unos y la aprobación de otros,

jicieron feria en mi pueblo pá vender mulos y potros.

 ¿Pero tú no lo sabías? hombre una barbariá,

¡Cómo se pone esos días! de ganao la Cañá!.  … //….

            Hoy día los terrenos de la antigua Cañada albergan el Pabellón Polideportivo, una pequeña placita para los populares festejos taurinos, “las vaquillas” y, por acuerdo del Ayuntamiento, se instala allí la feria de Julio. La Plaza de los Pedroches se ha quedado para eventos más tranquilos que no invadan las madrugadas, normalmente lúdicos o culturales.

             A la historia de La Cañada hay que sumar un dato relevante para la memoria de Alcaracejos: su pozo fue construido por el primer ayuntamiento republicano en la II República, constituido el 5 de junio de 1931. Esta afirmación se basa en varias referencias encontradas en su Archivo Municipal: Así en la sesión extraordinaria del pleno del 14 de julio de 1931 se aprueba “que se haga un pozo para abrevadero público en La Cañada[4]. En la sesión del 2 de agosto, bajo la presidencia de Lorenzo Pedrajas Benítez que hacía de alcalde accidental, en presencia de las tres cuartas partes del número total de concejales y dentro del presupuesto del Plan de Obras municipales se aprueba “la construcción de una fuente en la Cañada con destino a lavadero público por 6.000 pesetas[5]. Se observa el cambio de abrevadero por lavadero, siempre públicos. La última referencia escrita la podemos ver en el acta del pleno del 16 de agosto de 1931[6] en la que “se faculta a la Comisión de obras públicas para que resuelva lo relativo al desagüe de la fuente que se está construyendo en la Cañada”.

            La confirmación definitiva, a día de hoy, está a la vista de todos/as en la cara sur del brocal del pozo sito, claro está, en La Cañada. Aunque alguien trató de borrarlo a golpe de martillo y cincel, herramientas frecuentes en Los Pedroches, con un poco de paciencia y buscando el mejor ángulo de la luz que incide, se puede leer: “PRIMER AYUNTAMIENTO REPUBLICANO – 1931”. Las dos primeras palabras se leen perfectamente. La palabra REPUBLICANO está conciezudamente borrada, pero la extensión del hueco dejado, alguna letra suelta y los documentos encontrados me conducen a reafirmarme en lo dicho. La fecha, algo dudosa también por el daño causado por los golpes, podría ser 1931 ó 1937: a tenor de los datos encontrados en el archivo (AMAL) y que en 1937 no hubo ningún “primer ayuntamiento” me decanto por 1931. Así pues todo nos lleva a que el pozo / fuente de La Cañada es señal inequívoca del advenimiento de la II República en Alcaracejos. 

Inscripción en brocal de la fuente, 2015. Fotos S. Muriel




[1] Alcaracejos tiene con este santo un voto de agradecimiento perpetuo por haberlo librado de una epidemia de peste, en 1800 según López Navarrete, J.

[2]HC227.3 Acta del 8 de agosto de 1950, AMAL.

[3] Muriel Rísquez, C., Alcaracejos y otros lugares: una visión muy personal. Edita Sebastián Muriel, 2018, pág 17.

[4] HC231.4, AMAL.

[5] Idem.

[6] HC231.7, AMAL.


jueves, 18 de noviembre de 2021

Pequeños muchos datos (3)

 


1916, 30 de abril * Plaga de langostas
[1] *Pleno del Ayuntamiento

                Se avisa de una plaga de langostas que amenaza causar daños de importancia a la agricultura. La Corporación autoriza al Sr Alcalde para tomar cuantas medidas sean necesarias con el fin de combatir tan terrible plaga y que, además de auxiliar a la Junta Local contra plagas, se autorice del capítulo de imprevistos la adquisición de insecticidas, aparatos, pago de jornales, etc…para mejor resultado de la campaña.

 Nota: Se me ocurre preguntar: ¿Por qué ya no hay plagas de langostas?

 1.921, De Gibraltar a Bilbao pasando por Alcaracejos[2]

                El Sr. Presidente hizo saber a la Corporación que, oficiosamente, ha conocido el reciente establecimiento de la línea telegráfica de Gibraltar a Bilbao, la cual pasa por esta población. Al calor de esta excepcional circunstancia estima conveniente convertir la Estación Telefónica municipal de esta villa en Telegráfica del Estado, en concepto de Estación de Pruebas para la referida línea y como servicio público. Consciente la Corporación de que su inmediata apertura resultaría muy beneficiosa para los intereses de este Municipio, se considera oportuno que el Ayuntamiento ofrezca casa y mobiliario para la misma.

Discutido el asunto con toda amplitud, la Corporación por unanimidad acordó:

1º.- Aceptar la propuesta de la Presidencia y que este Ayuntamiento costee local, casa y mobiliario necesario para la citada Estación Telegráfica. Su importe se abonará del capítulo de imprevistos, hasta que conste en presupuesto la consiguiente consignación. Y

2º.- Que este acuerdo se comunique por el Sr. Alcalde al Ilmo. Sr. Director General de Correos y Telégrafos. A la expresada comunicación se acompañará certificación del mismo.

               En términos parecidos, el 1 de enero de 1922, la Corporación confirmó los acuerdos anteriores, especificando que el Municipio cederá al Estado la Estación y línea Telefónica municipal de esta villa “una vez que se instale en ella, y esté funcionando, la Telegráfica del Estado que se proyecta establecer en la misma con motivo del paso de la línea de Gibraltar a Bilbao”.

 1924, 30 de marzo[3] *Premio por eliminar una loba.

                La Corporación acuerda abonar a don Rafael Ferrer Moreno 20 pesetas, como premio, por haber dado muerte a una loba.

Comentario

Es lo que había. De niños, década de los cincuenta, los mayores aún nos contaban historias de lobos que mataban ovejas a pesar de refugiarse en las majadas y de tener mastines vigilando con collares de púas.

               Contaban que, en la sierra, al anochecer, entre cortijos, sobre todo en tiempos de recolección de la aceituna, la gente visitaba a familiares, novias y amigos. Volvían tarde. Los lobos acechaban. Para ahuyentarlos, solían encender un mechero con llama porque sabían que un lobo nunca se acercaría a una luz en medio de tanta oscuridad. También servía hacer ruido, algo que rompiera el silencio como por ejemplo arrastrar una rama o un saco con alguna piedra, cantar, hablar en voz alta o darle palos a una lata. Una vecina nos narró que un conocido suyo, al no tener otro remedio, lleno de miedo, se le ocurrió arrastrar la propia chaqueta y funcionó.

 Al día de hoy, noviembre del dos mil veintiuno, aunque es una especie protegida, el aullido del lobo ha desaparecido de las Sierras, al menos en el Sur. Su presencia se reduce en España al cuadrante noroccidental, entre 1.500 y 2.000 ejemplares. La sombra de la mano del hombre es alargada.

 1929, Guía del automovilista

                Se trata de una guía editada por el Real club Automovilista de Córdoba que tenía sus oficinas en la C/ Claudio Marcelo, nos 21 y 23 * Teléfono 1000, en Córdoba capital. Se vendía al precio de 2 pesetas. En ella se relacionan los propietarios de automóviles asociados a ese club, indicando su nombre, marca del vehículo y localidad de residencia. No podemos citarlos a todos, así que hemos elegido algunos ligados a los Pedroches y, en particular, a todos los ligados con Alcaracejos. La guía tiene 132 páginas y en ella aparecen 3.671 propietarios de la provincia y de otras partes de España. 

Marca

Propietario

Ciudad / pueblo

Dion Bouton

Francisco Gómez Torres

Pozoblanco

Berliet

Antonio Herrero Martos

Pozoblanco

Hispano Suiza

Pedro Luis de la Cámara

Vva de Córdoba

Berliet

Cayetano Martos Herruzo

Vva va Córdoba

Austín

Rafael Rodríguez Morillo

Alcaracejos

Dodge

Miguel Sánchez Olmedo

Cardeña (Montoro)

Dodge

Salvador Caballero

Vva de Córdoba

Overland

Antonio Romero

Pozoblanco

Hudson

Feliciano Gallego Sánchez

Hinojosa del Duque

Hudson

Manuel Velarde Ramírez

Dos Torres

Ford

Eduardo Blanco

Pozoblanco

Dodge

José Rubio González

Vva del Duque

Dodge

Joaquín Gallardo Pérez

Pedroche

Ford

Fulgencio Benítez Arévalo[5]

Vva del Duque

Ford

Guillermo Vizcaíno

Pozoblanco

Dogge

Rufino Hinojosa Meran

El Soldado

Ford

Dª Juana Fletes Antón

Hinojosa del Duque

Ford

Dª Alejandra Velarde

Dos Torres

Nº 1031 Dodge

Manuel Ferrer Ruiz

Alcaracejos. A Canaleja??

Gray

Rufino Hinojosa Meran

Alcaracejos

Ford

Manuel Ferrer

Alcaracejos

 Recomendación: Si usted es propietario de un automóvil le conviene asociarse a esta entidad. En todo momento defenderá sus derechos, proporcionándole cuantos informes le interesen del estado de las carreteras, itinerarios, mapas, guías, etc…así como encontrará grandes ventajas al comprar accesorios de todas clases, ya que determinadas casas cordobesas tienen establecido un convenio especial con la sociedad para hacer bonificaciones a sus adheridos.

                Alcaracejos figura a 75 km de córdoba capital, pero son 113 ó 107 si se va desde Córdoba a Montoro.

1935, 16 de febrero * Choca camioneta con un carro y muere el conductor de este[5]

                En la carretera de Dos Torres a Alcaracejos (Córdoba), se ha registrado un desagradable suceso, que le ha costado la vida a un hombre. Según noticias del comandante de puesto de la Guardia Civil, una camioneta que conducía Antonio Pérez Alarcón chocó con el carro de Inocencio Medina García, resultando este muerto a consecuencia de la tremenda herida que recibió en la cabeza.



[1] Acta del Ayuntamiento de Alcaracejos. AMAL

[2] Archivo Municipal de Alcaracejos, AMAL, Acta de la sesión 4/12/1921

[3] Archivo Municipal de Alcaracejos, AMAL.

[4] Estoy casi seguro que este Fulgencio era el abuelo de Fulgencio Benítez, hijo de Pepe Benítez, taxista de Vva del Duque. Fulgencio Benítez, nieto, fue  ATS en Alcaracejos.

[5] El Noticiero de Cartagena, Pág 4. Observación: la única ligazón que intuyo entre Alcaracejos y Cartagena eran las minas. Posiblemente hubiera alguien que estaba al tanto de lo que ocurría en ellas y de paso, informaba también de otras cosas, entre ellas este curioso y trágico accidente.

miércoles, 10 de noviembre de 2021

MLNavarrete: Los espacios de Miguel

 


Habíamos quedado en su casa, siempre templo de la intimidad personal. Miguel me esperaba. Me contó que hasta el día de ayer había tenido albañiles. ¡¡¡ Desde el mes de agosto!…..! Estamos a seis de noviembre!…..¡Una paliza!!!.

Miguel vive en una casa tradicional de los Pedroches, en Alcaracejos. Sus bóvedas de arista lo delatan. Hace tiempo que el suelo cambió el empedrado por baldosas. La chimenea, antiguamente pieza esencial a la mitad de la casa, hoy es como un adorno más. Entre muros y bóvedas, estas casas mantienen buenas defensas contra el calor y el frio.

Miguel me invita a conocer su inmenso huerto. En él destacan unos olivos, un terreno labrado con sus surcos, yerbajos protegidos singulares,….Está todo diáfano, pero subdividido. El alma de Miguel forma parte de esos bellos espacios que son los patios, el corral, el huerto….un tres en uno inmejorable que poco a poco va teniendo su sello.

Miguel me llama la atención: ¿Has visto esos olivos? Un par de árboles, con sus solas dos ramas, parecen saludarme con los brazos en alto. Una escultura vegetal made in la mente de Miguel. Solo con una poda.

Me dice: Observa la pared, ¿ves los agujerillos? La pared es de piedras y a veces, entre una y la otra hay un agujerillo. Son nidos de los que solo vemos la puerta de la entrada. En su interior hemos dejado un hueco para que críen los pájaros, me termina diciendo. Con la mirada busco más agujeros y los encuentro. Pura sensibilidad la que destilan las ideas de Miguel.

Poco después subimos a la Cámara. La escalera, algo empinada, nos conducirá a ella. En su entrada, una bolsascensor captura mi atención. Miguel se explica: “Es un sencillo invento que nos evita subir y bajar”. La Cámara es la parte superior de su vivienda. Es un espacio amplio que Miguel ha acondicionado para que sea su estudio. A partir de ahora estará más tiempo en Alcaracejos que en Madrid. Las paredes y el suelo raspan un poco, están en modo basto. A Miguel le gustan así. El cemento del suelo está pintado de colores sin formas definidas. De las paredes cuelgan algunas obras y entre ellas Miguel pintará oleos, témperas, acuarelas o ceras, ….. imaginará sus mejores y originales trazos de colores bajo el denominador común de su exquisita sensibilidad.

Son los espacios de Miguel: La Cámara, el Suelo, el Huerto, los Olivos, los Nidos, la Pared…..Estoy seguro que en un futuro la gente, incluido yo, hablaremos de ellos. Cada artista-creador tiene su territorio. Todo indica que Miguel ha decidido el suyo: una casa en la calle Nueva, allá por mojinolandia. ¡Que la disfrutes!.

martes, 26 de octubre de 2021

Pequeños muchos datos (2)

 La Mojina, 1780

Homenaje a la mujer mojina, obra de
 Mª Isabel Puerto, 2018.
               José Luis González Peralbo, aparte de una entrañable persona, es un documentado investigador pozoalbense. Por convencimiento personal, por su pasión por la cultura y como miembro de la Asociación Piedra y Cal, siempre veló por el patrimonio, material e inmaterial, de Los Pedroches. Es un placer divulgar sus variados y atinados trabajos. El 9 de enero de 2015  José Luis publicó un artículo sobre los motes en Pozoblanco. La entrada se tituló “Desempolvando el archivo”. En él se hacía constar los “Motes, apodos y distintivos de Pozoblanco en 1780, según memorial de deudas que acompaña el testamento de Francisco García Murillo, realizado el 13 de septiembre de 1780 en la Puebla de Guadalupe, y bajo el que falleció de forma inmediata”.

               En el trabajo se citan multitud de motes. Entre ellos aparecen La Mojina, El Desquesado, Juana la del Valiente, Alonso el Majo, La Aguda, El Pullo, Bartolomé el de los Clérigos, Lorenzo el hortelano, La Pichona, Francisco el Ciego, Pedro Sábado, etc, etc,….

             Sobre el primero, La Mojina, lo publicado incluye el siguiente comentario: "El origen del apodo puede deberse a multitud de causas, desde una procedencia geográfica - Alcaracejos - a una tez o cabellos demasiado oscuros; desde una identificación de una mula, a un estado de ánimo o carácter; e incluso a su parecido con un ave". Cualquier explicación es posible en el mundo de los motes de 1780.

La compra de un diccionario[1]

               Don Sandalio Caballero Fernández manifestó que se había ofrecido a este municipio el diccionario de Administración Municipal  Municipal de España de D. Antonio Aleu, (1898), por la cantidad de 45 pts y como este municipio carece de obras de consulta creía conveniente la adquisición de los cuatro tomos para que puedan servir de guía a la Corporación; enterados los señores asistentes de lo manifestado por el Sr. Alcalde acordaron por unanimidad la adquisición del expresado diccionario y que se cargue al capítulo de imprevistos.

Banqueros en Alcaracejos

               Aunque es una información muy escueta merece la pena darla a conocer por ser un tema bastante desconocido en la localidad. En Alcaracejos desarrollaron negocios de banca[3] las siguientes personas:

               Pablo Calvo Sánchez, banquero, 1929 - 1933. En 1912 es Corresponsal del Banco Hispano Americano; en 1913 lo es del Banco Español de Crédito, adscrito a la sucursal en Córdoba y en 1931 del Banco Popular de los Previsores del Porvenir, adscrito a la sucursal de éste en Sevilla.

               Rafael Muriel Trapero [*], en 1913 es corresponsal del Banco de Cartagena, adscrito a la sucursal de éste en Sevilla. En 1933 trabaja como cobrador de giros.

               Rafael Muriel de Zúñiga [*], corresponsal de banca, 1929 - 1933. En 1917 estuvo vinculado a Fomento Agrícola de Andalucía por medio de Antonio Conrotte Barbero, el cual en 1916 interviene en la Sociedad La Bética Minera, con la que también se relacionan los señores Muriel, banqueros de Alcaracejos.

 [*] Rafael Muriel Trapero y Rafael Muriel de Zúñiga eran, respectivamente, mi bisabuelo y mi tío abuelo, por parte de padre. Por lo que sé llamarlos banqueros lo creo exagerado ya que como mucho trabajarían como corresponsales: no es lo mismo trabajar para un banco que ser banquero. En cuanto a su relación con Fomento Agrícola de Andalucía y la Sociedad la Bética Minera he investigado y no conseguido encontrar ninguna pista que concrete esa conexión. Desconozco por tanto el tipo de relación que pudieron tener con esas entidades.

Radio Córdoba, 1.946[6]

               A lo largo de la sesión se dio lectura a una carta de Radio Córdoba EAJ24. En ella se solicita una subvención del Ayuntamiento a cambio de dar anuncios de subastas, edictos, festejos y otros; la Corporación, teniendo en cuenta la situación económica por la que atraviesa el municipio – cada día con más cargas - acordó desestimar dicha propuesta.

1920, Algunas cuentas en el Ayuntamiento[7]

               Se trata de un conjunto de acuerdos variopintos y variados que tomó la Corporación Municipal hace más de cien años. El acta dice:

               “Se presentaron y fueron aprobadas las cuentas de los matadores de animales dañinos, la de socorros a pobres transeúntes y la de reparación de la línea telefónica, así como la de los gastos hechos en la reparación de la Casa Ayuntamiento. También se aprobaron los gastos ocasionados por la proclamación de concejales, la de reparación de fuentes y cañerías y la de combatir la enfermedad variolosa, y que esta última se abone del capítulo de imprevistos y del mismo [capítulo] a D. José Ventura[8] 150 pesetas por los trabajos en esta oficina; y a las familias de las víctimas del hundimiento de la casa nº 7 de la calle Rey setenta y cinco pesetas y 25 pesetas por el Sermón de Ntra. Sra. de Guía al Sr. Cura. Desempeñaba el cargo de alcalde Rafael Alcalde Rodríguez, siendo secretario Antonio Ayala López.”

 



[1] Acta de la sesión del Ayto de Alcaracejos del 13 de mayo de 1900.

[3] Patxot Nieto, V. y Giménez Arnau, E.: Fuentes: Banqueros y bancos durante la vigencia de la ley Cambó 1922-1946. Edita el Banco de España, 2001.

[6] 1946/ 11/ 30 – Acta sesión Ayuntamiento de  Alcaracejos.

[7] 1920/ 03/ 28 – Acta sesión Ayuntamiento de Alcaracejos.

[8] José Ventura (1862 - 1928), ejerció como Maestro Nacional en el pueblo durante 28 años. Colaborador asíduo del Ayuntamiento en trabajos de estadística, amillaramientos, planimetría, etc.